Libros como el club de las 5 a.m. de Robin Sharma o Tools of Titans de Tim Ferris han popularizado las rutinas matutinas o en su nombre más sexy anglosajón la morning routines.
Y si no estás familiarizada/o con esto, quizá te estés preguntando… ¿Qué es la morning routine?
Es algo sencillo. Se trata de la secuencia de acciones o paso a paso que llevas a cabo cuando te levantas de la cama. Puede durar 30 minutos, o 3 horas. Normalmente lo que determina el final de la morning routine es que pasas a hacer “algo” para un “otro”: sea trabajo por cuenta ajena, cuidados de otras personas, o tus propios proyectos personales*. Digamos que termina el “tiempo para ti” en el que tienes la libertad de hacer realmente lo que te de la gana.
**Nota: La morning routine puede incluir dedicar 90 minutos de atención sin distracciones a un proyecto importante (tuyo o de otro).
Te adelanto que todos tenemos una, y también que si crees que no la tienes, o nunca has pensado en ella, es porque la que llevas a cabo ha sido -generalmente- decidida o definida por otra persona, por la sociedad, o simplemente por la inercia y tu piloto automático.
Por eso, es importante para recuperar tu poder, que dediques unos minutos hoy a reflexionar sobre tu rutina matutina.
Cuando lees acerca de cómo son las primeras horas del día de los top performers hay elementos en común que me he ido encontrando en mi obsesión por diseñar la mejor rutina para mí. Algunas claves son…
1- Suelen empezar el día temprano y en silencio.
2- Dedican algo de tiempo a prácticas que ayuden a purificar la mente: meditar, escribir, visualizar, breathwork o respiraciones conscientes…
3- Incluyen algún tipo de actividad física más o menos intensa.
4- Se exponen a la luz del amanecer: para regular los ritmos circadianos y complementan esto con una ducha de agua fría.
5- Utilizan un rato de su mejor concentración para aprender algo, leer, inspirarse o llevar a cabo alguna tarea que sea muy exigente.
Como puedes ver esto podría ser breve o ocupar una cantidad considerable de horas, teniendo en cuenta que inviertes tiempo en el cambio de actividad o desplazamiento, te duchas, desayunas, haces la cama, te preparas para lo que viene después etc…
Así que, hoy, te invito primero a reflexionar sobre cómo es tu rutina matutina.
Escribe tu paso a paso mañanero de lo que haces un dia como hoy -sin modificar nada y apuntando lo que dura.
Ahora viéndolo en papel, pregúntate para cada paso…
¿Quiero hacer realmente este paso? Lo he elegido yo? Lo hago para mí? Qué me aporta?
Y una vez hecho eso, trata de definir qué pasos no existen y te gustaría incluir.
¿Qué me gustaría incluir? ¿Cuál sería la versión mínima de este paso?
Por ejemplo, si quisieras leer o hacer un curso por la mañana, puedes pensar en leer 5 páginas. Si estás pensando en incluir el deporte, podrías incluir una serie de ejercicios, etc… Es importante que pienses en la versión mínima para no abrumarte.
En diciembre hice un video sobre esto, que te dejo por aquí.
Y ahora, que ya tienes los pasos que quieres incluir o los cambios que te apetece hacer, vuelve a escribir el paso a paso con tiempos aproximados y en el orden en el que te gustaría hacerlo.
Si es la primera vez que te enfrentas a un ejercicio así, puede ser abrumador. No te agobies, piensa simplemente que estás haciendo experimentos a ver cómo se siente probar nuevas actividades al despertar. Si coges la costumbre de tomar notas, y sigues observando tus sensaciones corporales al levantarte y al acostarte será relativamente fácil darte cuenta de qué te viene bien y qué no.
Descanso, sensaciones y hoy… a descubrir y profundizar sobre lo que te viene bien al empezar el día. Que empiece bien tu semana.